El pasado 27 de Septiembre, quedamos unos locos para hacer la foto de la luna llena justo cuando se ponía entre las 4 torres, fue trabajo de mucha planificación, madrugón y escalofríos al ver cómo todos nuestros cálculos daban como resultado una caída de la luna justo donde habíamos previsto.

Todo comenzó cuando el grupo quedó para hacer el mismo encuadre la pasada luna llena, el 28 de Agosto, pero justo ese día yo comenzaba las vacaciones y partía rumbo de Murcia, por lo que me perdí la quedada, para solucionarlo, planifiqué la localización de la siguiente luna llena.

La planificación la realicé con el programa PlanIt! para fotógrafos, ya que tengo un Android y el Photopills lleva décadas migrando su aplicación de iPhone a Android.

 Lo primero era calcular el día D y la hora H, un sábado cercano a una luna llena,el 27 de Septiembre, un día antes del eclipse lunar, qué pena que no coincidiera, a las 7 de la mañana la Luna se escondía y el sol aparecía a las 8, por lo que no nos estorbaría.

Lo siguiente era la localización, poniendo banderas en cada torre y dándo su altura (se puede buscar en la wikipedia), puedes ir jugando con la cámara para alinear la luna, ajustando la longitud focal en 280mm salió como lugar Paracuellos del Jarama, a una distancia de las 4 torres de unos 13,8 km, Paracuellos del Jarama es un lugar muy socorrido para hacer fotos del aeropuerto y tiene un mirado con unas perspectiva de Madrid muy buena. El lugar salía un descampado, el cual me acerqué unos días antes para ver si se podía acceder, además de ver la vista, aunque ya street view de google me indicaba que era posible.

Ahora era el turno del encuadre, si miramos la opción de Visor (VR) podemos hacernos una idea de cómo caerá la luna y si hemos acertado en la localización, todo parecía correcto.

Quedamos a las 6:15 de la mañana del domingo, por lo que me desperté a las 5, mucho más temprano que cuando voy a trabajar, pero ya dicen que sarna con gusto no pica, cogí cámara, teleobjetivo y trípode y me puse en camino. Al llegar ya habían llegado casi todos los que quedamos, fue el último en llegar, allí conocí a gente nueva, calcé mi 70-200 y  a tanta distancia, el 200mm se queda muy corto, menos mal que me dejaron un multiplicador 1,4x de Canon y al menos pude tirar la foto a 280mm que luego con el recorte, pude salvar el encuadre. La luna iba bajando y cada minuto que pasaba más y más se acercaba a la mitad de las 4 torres cuando ya a las 7:01 mi 6D disparó la foto que me había hecho madrugar y hacerme feliz.